11 dic 2009

PS: I.C.

Hay veces que sólo quisera dejar de pensar en ello, ya saben como en una película, poner pausa y continuar después, cuando el ánimo así lo permita. Cerrar una historieta para continuarla más tarde en un sueño vívido lleno de colores y maderas finas. Un estampado azul y dos cuerpos en el agua que salpican satisfacción y orgullo. El retrato familiar de una meta lograda y el regodeo espiritual de un alma empapada. La cubierta es gruesa e inmune a la vanal pero común idea del vacío material. Todo fue previamente calculado y trabajado, todo siempre contemplado y soñado.
Ahora, siendo parte de una lírica idolatrada, conjugo el pasado con el futuro: Para eso es que estamos aquí...

Nada pasa sin haberlo provocado, nada sucede sin haberlo contemplado, soñado o incluso robado. Todo es parte de una serie de sinapsis únicas que se desatan en la mente de uno. "Sinapsis únicas". ¿Qué acaso eso no es implícito? Si de obviedad viviera el hombre, él mismo hubiese inundado la Tierra, las estrellas y el espacio. Sólo me basta saber que nunca es tarde y tarde es nunca un pretexto. Si bien era sabido por ellos, por qué sería tan difícil de entender para nosotros:

"Aquí sólo venimos a soñar, aquí sólo hemos venido a conocernos..."

Así que dejando abierta cada una de las páginas, dejando correr la película; sólo espero nunca dejar de soñar, espero nunca abandonar la búsqueda y más que nada espero nunca dejar de conocernos.

John Lennon - Watching The Wheels

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